Hoy compartimos los puntos esenciales que debes tratar para mejorar las condiciones de confort y calidad de tu vivienda, y hacerla más eficiente:

1º OPTIMIZACIÓN DEL ESPACIO: En primer lugar, debemos preocuparnos por la distribución del espacio, que consistirá en buscar la mejor manera de desarrollar las actividades a las que se destina cada estancia. Para ello es fundamental conocer las necesidades del usuario. Un simple cambio de distribución a partir del estudio del espacio puede resolver problemas importantes, sin necesidad de un desembolso mayor. Entender el espacio y las posibilidades que nos aporta sus diferentes configuraciones es la primera muestra de nuestro compromiso con la sostenibilidad y el reciclaje.

2º LA LUZ: Debemos pensar el espacio entorno a las ventanas, aprovechando al máximo la luz natural para los usos previstos en cada una de las estancias. Para potenciarla, podemos utilizar los

colores de los acabados, para reflejarla y dirigirla hacia los puntos donde es más necesaria. Y como complemento, una buena distribución en la iluminación artificial, que nos permita regular la intensidad y el color en cada momento, con lámparas de techo, de pared o de pie.

3º MOBILIARIO: Por último, la capacidad de almacenaje es algo fundamental para el buen funcionamiento de una vivienda. Por eso creemos que se debe aprovechar cada elemento de mobiliario para almacenar los objetos que no se utilizan, para dejar a la vista solo los elementos necesarios para la vida diaria.

Con estos 3 puntos, aplicados por separado o combinados entre sí conseguiremos una vivienda más eficiente y confortable. Esperamos que os sea útil estos consejos para la reforma de vuestras viviendas. Y si necesitáis consejos, contactad con el equipo de HABLA Arquitectura!!

por María Ruano, arquitecta